Empezó siendo algo extraño y hoy es algo cotidiano en las bodas: el vídeo. Ya sea por sorpresa o algo totalmente premeditado, el resultado es el mismo: emoción. Tanto de los novios como de los invitados, porque recordar buenos momentos siempre es emocionante.

Ahora bien, ¿cómo nos ponemos a ello? No es tan difícil. Se puede hacer una «modesta» presentación en powerpoint con poco más de 20 fotos o un montaje de vídeo con formato profesional. Lo recomendable es que dure entre 3 y 8 minutos. Y si no sabemos qué poner de fondo musical, para eso está el dj, por supuesto. También para aconsejaros qué es mejor, si utilizar una pantalla de proyección o una de televisión. Porque aunque en un primer momento era más frecuente el proyector, ahora las pantallas planas tienen formatos muy grandes. En Sonifón disponemos de los dos métodos, solo depende del salón y de la luz exterior…
Para terminar, solo un consejo: es muy recomendable que el dj tenga el vídeo antes de la boda para hacer una prueba. Los formatos informáticos a veces fallan y conviene evitarse un sofocón en el momento clave.